Comunicado del Bloque Combativo en la huelga del 13A

     «No estamos aquí por estar, hemos venido a mostrar nuestro rechazo a estas reformas neoliberales y al sistema educativo general que solamente ayuda a perpetuar esta sociedad elitista, patriarcal y capitalista.

     
     En estos dos últimos años hemos sufrido al completo los cambios de la LOMCE y el 3+2; y es ahora más que nunca cuando podemos afirmar que estas leyes atienden a motivos capitalistas y clasistas, propios del gobierno que ha promovido estas reformas. 
     
     Desde la infancia se nos clasifica con una nota a través de las revalidas y se nos divide en estudiantes de primera o segunda. Se precariza la eduación de las segundas, de manera que estas solo pueden tener acceso a trabajos poco cualificados, mal pagados y con menores garantías y derechos. Siguiendo esto, llegamos a la brecha social que estas clases dominantes quieren que alcancemos, en la cual se nos sitúa como inferiores o superiores a otra persona en función de la educación a la que se la ha permitido acceder, cuando realmente pertenecemos a una misma clase. El problema se extrapola a la universidad con el 3+2. Se encarecen los estudios y se trasladan gran parte de los contenidos al máster. Los años del grado constituyen ahora una base general de los conocimientos de la carrera de forma que se obliga a pagar por un máster de hasta 15.000€ para poder competir en el mercado laboral.
    Existe también una explotación de las estudiantes a nivel de trabajos prácticos tanto en la  universidad como en la FP, donde las becarias están esclavizadas a la empresa, cobrando sueldos nulos o totalmente insuficientes y sin derechos laborales. Al mismo tiempo, y no por casualidad, se nos impone una reforma laboral en la que se abarata el despido, se favorecen los contratos basura, se recortan derechos laborales y sindicales y se permite el uso de las estudiantes como mano de obra gratuita a costa de despedir a otras obreras.
    No solo nos oponemos a estas reformas sino que criticamos al sistema educativo desde su raíz. Esta educación no solo es una herramienta de la sociedad capitalista sino también un instrumento para la perpetuación del patriarcado. Desde que entramos en el sistema se nos bombardea con unos rígidos roles de género en los cuales nos vemos obligadas a encajar por miedo al rechazo colectivo, poca falta hace mencionar que la teorías de género está ausente en la escuela. Además sufrimos una total falta de educación sexual: con suerte recibiremos alguna charla sobre cómo usar un condón, pero nunca nos hablarán de respeto o consentimiento. Por si fuera poco, no existen protocolos en caso de acoso o agresión machista, sino que estas agresiones son tratadas como asuntos personales o cosas de crios y no como acciones que se encuentran dentro de un marco social, el patriarcado, que las legitima.
    Nos presentan la educación como el paso para llegar a ser personas críticas, autónomas, que se podrán desenvolver en la adultez; nada más lejos de la realidad. Nos educan para ser instrumentos de producción sumisos, dándonos únicamente unos conocimientos técnicos enfocados al mundo laboral y excluyendo todo aquello relacionado al progreso personal, pensamiento crítico y creativo, etc. La presión a la que se somete a la alumna con el fin de que se adapte a los moldes establecidos no consigue sino el estrés, la ansiedad y frustración de esta persona al no encajar con el modelo impuesto, minando su autoestima, llevándola a veces hasta la depresión.
    Tampoco nos comformamos con estar a la contra. Tenemos mucho más que decir. Exigimos una educación participativa, crítica, que respete tanto a nosotros como a la tierra que pisamos y sirva para transformar la sociedad en vez de perpetuarla. Una educación en la que todos tengamos cabida, en igualdad. Una educación en la que podamos decidir qué y cómo aprender. Una educación en la que se nos enseñe a vivir en comunidad y armonía con el medio. Una educación en la que el bienestar y el desarrollo personal de cada una de nosotras esté por delante de los intereses economicos. Una educación que promueva la cooperación en lugar de la competición. Una educación en la que no seamos ni números ni mercancía. 
 
     Por todo esto hacemos una llamada a la lucha y a la unidad, por encima de banderas y siglas, no solo a la comunidad educativa, si no a la sociedad en general, puesto que toda ella se ve afectada por este sistema. A una lucha desde la base contra todo lo ya mencionado, contra problemas a los que nos enfrentamos todas y cada una de nosotras. Es hora de que nos organicemos en cada colegio, en cada instituto, en cada universidad. Es hora de que demos la batalla en función de nuestros intereses y necesidades colectivas, marcando nuestros ritmos, en vez de limitarnos a seguir movilizaciones convocadas por organismos ajenos y partidistas. Es hora de que entre todas juntas construyamos la educación que queremos.
    Estudiantes combativas en contra de la educación capitalista.
    La educación se construye desde abajo.»
Y aquí algunas fotos de la manifestación:
IMG_20160413_122003527
IMG_20160413_122006330ManiLOMCE2